CUIDADO CON EL SILENCIO SÍSMICO AL SUR DEL PERÚ Y AL NORTE DE CHILE .

En el peor escenario, si se liberara toda la tensión acumulada en la zona, calculan que el sismo podría tener una magnitud cercana a 8,8, seguido de un tsunami con olas de hasta 14 metros.
Expertos detallan cómo podría ser el terremoto anunciado para el norte En el peor escenario, si se liberara toda la tensión acumulada en la zona, calculan que el sismo podría tener una magnitud cercana a 8,8, seguido de un tsunami con olas de hasta 14 metros. En uno de los peores escenarios, se calcula que el terremoto en el norte del país podría alcanzar una magnitud cercana a 8,8. Foto: Emol.com Entre el sur de Perú y la península de Mejillones no se registra un terremoto importante en los últimos 137 años. Foto: Emol.com Serie de sismos han sacudido este martes a las costas de la Región del Biobío Sismo de mediana intensidad se registró en la costa de la región de Tarapacá Fuerte sismo de magnitud 6,3 Richter remeció al extremo norte del país Nuevo sismo de mediana intensidad afecta a la Región del Biobío Varias réplicas se han registrado en el Biobío tras el fuerte temblor de esta tarde Ver más Sismos en Chile SANTIAGO.- Si bien no se puede predecir cuándo ocurrirá el terremoto que está anunciado para el norte del país, los científicos han logrado proyectar algunos escenarios posibles, como la magnitud y el tamaño que podría tener el tsunami, en caso de que se produjera un movimiento sísmico importante.   De acuerdo a los antecedentes, en el norte hay una "laguna sísmica" que abarca desde el sur de Perú a la península de Mejillones (unos 500 kilómetros), donde no se ha producido un terremoto importante desde 1877 y 1866. Esto quiere decir que la placa de Nazca no se ha desplazado bajo la Sudamericana en casi 137 años, por lo que hay un desplazamiento acumulado de 9,5 metros (7 cm por año). Por eso, los científicos esperan que las placas se acomoden con un gran movimiento telúrico. Algunas señales, como el levantamiento que hoy registra la zona costera, debido a la presión que ejerce la placa de Nazca contra la Sudamericana, son indicios de que se estaría incubado un terremoto. Ante esto, la primera pregunta que surge es qué magnitud podría alcanzar un terremoto en esa zona. El director del Laboratorio de Tsunamis del Instituto de Geografía de la U. Católica, Marcelo Lagos, explica que para calcular la magnitud de momento (Mw) de un terremoto se requiere conocer una serie de variables: la longitud y el ancho de la falla, el desplazamiento de las placas tectónicas y la rigidez de las rocas alrededor de la falla. En el caso de la zona norte, Marcelo Lagos indica que el peor escenario que han calculado en base a estos parámetros, es decir, si se rompiera toda el área (500 por 150 kilómetros) y las placas se desplazaran los 9,5 metros acumulados, el terremoto podría alcanzar una magnitud de 8,8. "Con los datos y la información que tenemos y con la historia que conocemos del norte de Chile, éste es el peor escenario creíble", explica. No obstante, dice que no se puede descartar que el terremoto sea mayor, cercano a 9, ya que puede haber factores que no manejen. "Siempre la naturaleza nos sorprende", afirma. "Independiente de que todo indica que podría ocurrir un evento probable de magnitud 8,8, no hay que descartar la posibilidad de algo mayor. Si rescatamos lecciones de lo que pasó en Japón en 2011 y en Indonesia en 2004, ambos países fueron sobrepasados por eventos gigantes que nadie esperaba". Pero también podría darse un tercer escenario: Que la energía acumulada no se libere toda de una vez, sino que en forma parcelada, y en lugar de un sólo gran terremoto ocurran varios de menor magnitud
. "Uno podría esperar desde un terremoto de magnitud superior a 8,5, hasta varios terremotos de menos magnitud, cercanos a 8 Richter, porque estas zonas no se comportan siempre de la misma manera", explica el director del Centro Sismológico Nacional (CSN), Sergio Barrientos. Otra interrogante, relacionada con la anterior, es cuánto podría ser la duración máxima del terremoto. Sergio Barrientos explica que, para calcular esto, se debe considerar el tamaño que alcanza la falla, la que se rompe a una velocidad aproximada de 3,5 kilómetros por segundo. Tomando eso en cuenta, en el caso hipotético de que se rompieran los 500 kilómetros en el norte, la duración del terremoto sería de casi dos minutos y medio (unos 142 segundos). Mientras que si la falla fuera más pequeña, la duración sería menor. A modo de ejemplo, Barrientos indica que el terremoto del 27-F, donde la falla fue de unos 450 kilómetros, tuvo una duración del orden de dos minutos (unos 128 segundos). Tsunami: Olas promediarían los 8 metros de altura Lo que sí está claro, es que si se produjera un gran terremoto en el norte del país –de magnitud 8 hacia arriba–, lo más probable es que provoque un tsunami. Según explican los expertos, esto debe a que en esa zona prácticamente toda el área de ruptura está debajo del mar, entre la costa y la fosa, por lo que al activarse la falla, produciría cambios de elevación en el fondo oceánico, que es lo que origina los tsunamis. Para un terremoto de magnitud 8,8, Marcelo Lagos afirma que el tsunami sería "grande y destructivo". De acuerdo a los modelos elaborados por el Laboratorio de Tsunamis de la UC, apenas unos 20 a 25 minutos después del terremoto el mar podría comenzar a inundar el borde costero del norte de Chile, con olas de 4 a 5 metros de altura. Por eso, el experto pone énfasis en que la evacuación de la población hacia zonas seguras (sobre la cota 30) debe ser inmediata, sin esperar ningún aviso. "El terremoto es la alarma", subraya. Durante todo el fenómeno, estima que las olas promediarían unos 8 metros de altura en la línea de costa –equivalente a un poste del alumbrado público–, aunque algunas incluso podrían llegar hasta 14 metros. Mientras que en las zonas de acantilados, como los que hay en Mejillones, podrían registrarse alturas excepcionales, superiores a los 20 metros. Según indica el geógrafo, el tsunami podría extenderse por unas 24 horas –con distintos trenes de olas – , aunque remarca las primeras seis a ocho horas después del terremoto son las más "peligrosas", y luego el nivel del mar "se comienza a atenuar, disminuyendo los niveles de peligrosidad". Sin embargo, aconseja que las personas esperen la autorización de las autoridades para regresar a las zonas bajas. Respecto del área que afectará el tsunami, explica que éste llegará con fuerza a toda la costa ubicada frente a la falla, pero advierte que también podría alcanzar las zonas costeras del centro y sur de Chile. Los lugares que estarían más expuestos serían las bahías que miran hacia el norte –en la dirección en que vienen las olas–, como Coquimbo, Constitución, Dichato, Talcahuano y el Golfo de Arauco, entre otras. A juicio del experto, se debería ordenar la evacuación al menos hasta el Canal de Chacao. En el sitio web del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA), están disponibles mapas de inundación de distintas ciudades del país en caso de que ocurra un tsunami. Si se compara con el 27-F, Marcelo Lagos señala que un tsunami en el norte del país, si bien podría ser similar en magnitud al ocurrido en el Maule, su "impacto" sería distinto "porque la jerarquía de los asentamientos humanos es mayor". "Estamos hablando de grandes ciudades costeras, donde viven cientos de miles de personas, y de grandes puertos relevantes, donde sale todo el cobre del país", apunta. Por Natacha Ramírez, Emol Sábado, 22 de Marzo de 2014, 13:35 ¿Un gran terremoto en el norte se sentiría en la zona central? Varios se preguntarán si un terremoto con epicentro en el norte también se podría percibir en las regiones que están en el centro o más al sur. Según explican expertos, lo más probable es que el movimiento telúrico sólo se perciba en el norte grande y en el norte chico, aproximadamente hasta la Región de Coquimbo, pero no en la zona central.   Incluso si la magnitud del terremoto llegara a 9, es decir, muy grande, en Santiago sólo lo podrían sentir las personas que estén en reposo en pisos altos de un edificio, siendo imperceptible para la mayoría de la población.   Esto se debe a la gran distancia que hay entre la zona norte y la zona central del país y que a la altura de Tocopilla, en la Segunda Región, habría una "barrera natural", que frena el paso de las ondas.
CORTESÍA DE EMOL


}