UNA MUESTRA DE AMOR ; ES ALEJARSE

Alejarse no quiere decir que esa persona no nos importe. De hecho, puede ser indicativo de que lo apreciamos mucho más, ya que queremos que crezca por sí solo

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Alejarse de alguien puede ser una gran muestra de amor. Porque nuestra presencia a veces no ayuda, sino todo lo contrario. Creemos que es valioso estar al lado de alguien, pero ¿y si fuese más valioso alejarse?


No necesariamente tienen que hacernos sentir mal, insultarnos o convertirnos en la diana de algún tipo de daño. En ocasiones, tomar distancia de la persona que más queremos, puede ser un gran regalo en el momento adecuado.

Alejarse permite que los demás libren sus propias batallas

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¿Qué ocurre cuando queremos mucho a alguien? Deseamos que nada malo le pase y velamos por su bienestar hasta tal punto que, si pudiésemos ponernos en su lugar, lo haríamos.

No obstante, sabemos que esto no es positivo. Imaginemos que estuviésemos pasando por un momento muy malo del que no conseguimos levantar la cabeza. Puede que a nuestro alrededor nos brindasen palabras de aliento, pero eso es todo: no pueden hacer nada más.


En el caso de que alguien nos intentase dirigir, aconsejar y guiar manteniendo su visión externa, o incluso haciendo cosas que deberíamos hacer nosotros mismos, nos estaría arrebatando la grandiosa oportunidad de aprender de una de las muchas experiencias que nos está brindando la vida.

Además, según este estudio de la Universidad de Sonora (México), estaríamos interfiriendo en su adquisición de una de las virtudes más importantes: la resiliencia.

Tendemos a huir de todo lo negativo que nos sucede. Si los demás quieren tomar la sartén por el mango, ahí se la dejamos. No obstante, hacerlo evitará que tomemos la responsabilidad de lo que nos ocurre.

A nadie le gusta sufrir, pero es que sufrir permite crecer, madurar y aprender. Sin lo negativo, jamás valoraríamos lo positivo; sin lo malo, no sabríamos dirigirnos hacia lo que más nos conviene.

Intentar ocupar el lugar de esa persona que tanto amamos, desear librar las batallas por ella es un tremendo error. Cuando el amor nos ciega tanto que nos impide pensar con claridad y observar que las circunstancias son las que son y pueden ser una gran oportunidad, alejarse es la mejor opción.

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Tomar distancia no quiere decir que no te importe

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Existen diferentes creencias que nos pueden abordar cuando pensamos en alejarnos de alguien, en darle su espacio para dejar de ser un lastre en su camino hacia el crecimiento.

Sin darnos cuenta, en ocasiones, manipulamos, coaccionamos y todo porque vemos la realidad de otra manera. ¡Es normal! Cada uno, en su lugar, hace una cosa diferente.

Pero, lo importante, es permitir que cada uno actúe como quiera, aunque a nosotros no nos parezca la manera más adecuada. Por eso es tan importante alejarse, aunque diversas creencias que tenemos en nuestra mente nos instan a seguir al lado de esa persona que amamos. Aquí tenemos algunas de ellas:

No me puedo ir de su lado porque, sin mí, ¿qué va a hacer? Esto está evitando que la otra persona tome las riendas de la situación, es más, le estás quitando valor como si no pudiese solucionar las cosas sin ti. No eres su salvador.

Si me alejo pensará que no le importo. Quizás la otra persona no piense así. De hecho, este puede ser un miedo que tú tengas a que los demás te miren mal por no hacer lo que se considera “correcto”.

Me necesita, siempre me dice que soy muy importante. Tal vez, la persona a la que tanto quieras se haya apoyado tanto en ti que dependa de ti para estar bien y afrontar la situación. No sabes cuánto la vas a hacer crecer si te alejas de ella.


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Las muestras de amor tienen diferentes perspectivas

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Tomamos como cierto y verdadero todo lo que hasta el momento hemos venido haciendo. Sin embargo, a veces hay que cuestionar las formas de actuar y de pensar, tomar nuevas perspectivas.

Durante mucho tiempo creímos que el fracaso era terrible, hasta que empezamos a tomarlo como un aprendizaje; consideramos la dependencia como sinónimo de amor, cuando el verdadero amor se cultivaba de forma individual.

Alejarse de alguien puede permitirle a esa persona crecer, madurar y volverse fuerte. Porque nadie puede tomar el control de nuestras vidas, excepto nosotros mismos.


No les arrebatemos a los demás la oportunidad de empoderarse. Si tienen miedo, si se han apegado y si nos necesitan porque creen que por ellos mismos no pueden, es el momento de alejarse.

Algunas veces, aunque duela, es mejor decir adiós

cortesia m.c.salud