Aquila, el avión no tripulado fabricado por Facebook para llevar a Internet a cualquier parte del mundo, ha realizado su primer vuelo real y a tamaño completo. "Hemos
estado volando en una versión más pequeña de 1/5 durante varios meses,
pero esta ha sido la primera vez que volamos la máquina a tamaño
completo", ha escrito Jay Parikh, ingeniero jefe de Facebook, en un mensaje publicado en la página web del grupo. Una portavoz explicó que la prueba había tenido lugar en Yuma Proving Ground, una base militar de pruebas situado en Arizona (suroeste). El
proyecto de Facebook es crear una red con este tipo de aviones solares,
colocándolos en forma geoestacionaria a gran altitud y con el uso de
láser conectarlos con los equipos de tierra o satélites de
comunicaciones. De esa manera, lograr que el 60% de la población que no
tiene Internet logre una conexión asequible.
Aquila es un avión impulsado por energía solar
que puede utilizarse para llevar Internet a cientos de millones de
personas en los lugares más difíciles de alcanzar. Cuando se haya
completado, Aquila será capaz de dar la vuelta a una región de hasta 60 millas de diámetro, con conectividad desde una altura de más de 60.000 pies con las comunicaciones por láser y sistemas de ondas milimétricas. Alphabet, la sociedad matriz de Google, explora una idea similar, pero con globos. Según ha detallado la red social, en su primera prueba a tamaño real, Aquila voló a una pequeña altitud durante 96 minutos, tres veces más largo de lo que se había previsto inicialmente.
Esto
ha permitido recoger datos para verificar sobre condiciones reales las
reacciones de aviones no tripulados con turbulencia o viento, la
aerodinámica, la fiabilidad del sistema de piloto automático, o de su
consumo de energía. "Aquila está diseñado para ser hiper
eficiente, por lo que puede volar hasta tres meses seguidos. La aeronave
tiene la envergadura de un avión de pasajeros, pero a velocidad de crucero va a consumir sólo 5.000 vatios, lo mismo que tres secadores de pelo o un horno microondas de alta gama", explicó Parikh. "En
las próximas pruebas, vamos a volar a Aquila más rápido, más alto y
durante más tiempo, de manera que podamos tomarlo por encima de 60.000
pies. Cada prueba nos ayudará a aprender más rápido y avanzar hacia
nuestra meta", finalizó. cortesia el mundo